Rocío Bazo

¡Hola, soy Rocío Bazo!

Psicóloga y psicoterapeuta. Máster en Psicología General Sanitaria. Experta en Terapia Familiar Sistémica. Nivel I de EMDR.

Disponible para ti si necesitas ayuda.

¿Y qué significa para mí todo esto?

Yo entiendo la psicoterapia como un proceso de acompañamiento en el cambio.
Qué importante es revisarse a uno mismo, poder elegir qué queremos y qué no de la mochila con la que cargamos. Porque todos cargamos con nuestra mochila: creencias, expectativas, mandatos, prejuicios, etc. que a lo mejor ni nacen de nosotros.
La terapia permite, entre muchas otras cosas, descargar. Para facilitarnos este camino de crecimiento.

Mi interés por la psicología ha estado presente desde que era pequeña.
A lo largo de mi carrera, he podido ayudar a muchas personas, a través de mi trabajo en distintos lugares. He aprendido a tratar a las personas que piden ayuda como personas que sufren, más allá de las etiquetas diagnósticas que puedan recibir en un momento dado.

Gracias a mis experiencias en Latinoamérica, he podido estar en contacto con la salud mental y psicosocial allí, lo que me ha enriquecido tanto cultural como clínicamente. Y me he dado cuenta de que, en esencia, todos sufrimos por los mismos miedos.

Además, me interesa mucho todo lo relacionado con el lenguaje, la comunicación y sus distintas formas de expresión, y también lo incorporo en los procesos de psicoterapia.

Nos llega todo tipo de información a través de miles de sitios, oímos de todo; escuchamos, incluso, de todo…, pero escucharnos a nosotros mismos nos cuesta más.

Nos pasamos el día conectados, a las redes sociales, a la tecnología…, casi más a mundos que no son el nuestro. Pero conectar con uno mismo… no es fácil, no estamos entrenados en eso.

En esta sociedad que va tan rápido, en la que parece que no tenemos ni cinco minutos para pensar, nuestra salud mental, tarde o temprano, nos pide que paremos, que nos escuchemos. Te animo a que te pares a SENTIR, para que sepas lo que verdaderamente necesitas.

Puedes contar conmigo para ayudarte a escucharte, a entenderte, a conectar contigo y tus necesidades. Puedo ayudarte a que te encuentres mejor. O todavía mejor.

Si te encuentras mal o no sabes qué te pasa…, TE ESCUCHO.